miércoles, diciembre 13, 2006

Cafeína y ácido acetlisalicílico con azúcar. 23/25 abril

23 de Abril
09:07h


Tengo los pies destrozados por todo lo que caminamos ayer. Fuimos a Portobello, cerca de Nottin Hill, en donde había un montón de tiendas y puestos. Lástima que todo sea tan caro aquí. Por suerte, logré regatear a duras penas con mi inglés y conseguí un vinilo de Kate Bush por cinco libras y una edición antigua de Madame Bovari por siete. También fuimos por la calle Oxford, que está a rebosar de tiendas de todo tipo, pero lo dicho, muy caro. Además, es un poco absurdo gastarse aquí dinero en ropa si en España hay prácticamente lo mismo casi a mitad de precio. Aunque descubrí una tienda de lencería en donde había unos corpiños preciosos... en fin, si volvemos, tal vez me adjudique uno, aunque se salga del precio recomendado.
En el Victoria and Albert museum me lo pasé muy bien, viendo vestidos y decorados de la Edad Media y haciendo fotos a las réplicas de esculturas griegas y romanas como el David de Miguel Ángel, el de Donatello, etcétera. Precioso.
El de ciencias no fue para tanto, pero me reí bastante con Johana.
Sí, me están sentando muy bien estas pequeñas vacaciones en Londres, aunque debo admitir que de vez en cuando me vienen a la mente Javier y Víctor. En fin, nadie es perfecto.
Eso sí, las briznas van de mal en peor; tengo los dedos despellejados. Por lo demás... I love London.

Las 3:00 más o menos
23/04/06


¡¡Epa!! Qué pasa, compañera de habitación. Bueno, un poco lejos, pero en el mismo pasillo y piso. Y mañana de fiestuki con los portugueses. Menudos días que vamos pasando aquí en London city. Aunque prefiero Linobeno porque todo va más lento y hay menos estrés. Ya queda poco para volver y tengo ganas de ver a mis amigas, a mis queridas hortalizas. Que sepas que aunque hoy hemos hablado poco me has caído muy bien y tenemos que quedar en Linobeno. Ok? Muchos besos, guapa. Don’t worry, be happy!!

24 de Abril
09:10h

Lo anterior es obra de Isabela, una chica de otro instituto que ha venido con nosotros a Londres. En una chica genial, como Maite e Izaskun, dos chicas de autoedición. Son geniales, están locas y me río mogollón con ellas. Ayer fuimos al Buckingham Palace, pero nos llovió y fue un agobio de visita. También fuimos al Big Ben (o como se diga, la torre del reloj). Hizo un tiempo típicamente londinense: lluvia, lluvia, lluvia.
Bebí un capuchino en un vaso de cartón por la calle, me hice una foto al lado de una recreación escultórica de una obra de Dalí –justo en frente del museo “Dali’s universe”, al cual no entramos – más fotos chorras con Isabela y Maite... Ayer me reí un montón.
Por la noche estuvimos en la habitación de Johana y mía nosotras dos, Isabela, Maite, Izaskun y Loreto. Esta última va también a autoedición y está zumbada. Pero zumbada, no como lo pueda estar yo, sino zumbada en el sentido de que le falta un hervor, al estilo de Tamara, una chica que iba el año pasado a la Escuela y estaba loca, loca, loca, loca. Pero con cariño, Tamara era cansina pero muy buena gente.
Entre que Johana estaba convencida de que la noche anterior vio a una tía caminando por la repisa que hay bajo nuestra ventana e Isabela que nos contó el argumento de “Holocausto Caníbal”... Izaskun se animó también y nos contó anécdotas de sesiones de espiritismo que ha realizado con sus amigas, pesadillas, dejavus, telepatía inconsciente y toda clase de fenómenos parnormales. Acojonadas, fuimos a dar una vuelta por este hotel que parece interminable. Es un auténtico laberinto: pasillos infinitos, ascensores que se abren solos... Parecía el hotel de “El resplandor”. Conocimos a unos chicos portugueses y a unas chicas de Sudáfrica. Cultura interracial. En serio, ayer fue el mejor día.
He logrado ser feliz.


Martes 25 de Abril
9.17h


Estoy en la habitación, esperando a que Johana termine de arreglarse para bajar a desayunar. Hoy ya nos vamos de regreso a España. Me da penilla dejar esta ciudad, aunque echo de menos algo de Linobeno.
Estos últimos días han sido geniales, teniendo el tiempo siempre ocupado de manera que no se da lugar al cerebro de maquinar sobre temas innecesarios.
No sé nada de Dafne, Sonia y Lucía. Tampoco de Carlos, Álvaro, Almudena y Omar. Con la única gente que he hablado por teléfono ha sido mi familia. A Carol la llamé ayer pero no dejó de llorar sobre sí misma y de que un chico que trabaja con Pablo se ha muerto por no sé qué enfermedad y tenía miedo de que a su novio también le ocurriese algo malo.
Josefina me hizo una perdida anoche y yo le mandé un mensaje diciéndole que estaba en Londres y tal. He pensado que no hay que tener tan en cuenta las cosas. ¿Que no me felicitó el día de mi cumpleaños? ¡Pues no pasa nada! Alegría, alegría.
No he tenido “news” de nadie más.
Estoy muerta.

25/04/2006

¡¡Buenas!!
Pues aquí estamos en el avión volviendo de London City y nos vamos por fin a casa. ¡Qué bien! Con lo que echo de menos unas buenas patatuelas a la riojana, je je. Menudos días para recordar. Aunque también hay cosas que mejor olvidarlas, ja ja. Cuando veas estas páginas que te he escrito, espero que tengas un buen recuerdo mío, de la “Happy Lechu”. ¡Joder! Con tanta turbulencia no hay quien escriba. Aquí, aquí, aquí no hay quien escriba, aquí no, aquí no. Pues no sé qué más ponerte. ¿Te ha gustado Lenore, eh? Aquí me despido con la punta del boli. Muchos besos, guapa.
Isabela.

1 cafés:

Anónimo dijo...

y ahora toca Génova verdad?